Últimamente no oigo más que alagos a la nueva novela negra sueca y sobre todo a la trilogía de Millennium de Stieg Larsson sobre las aventuras de un periodista de investigación y una hacker heavy.
La verdad es que yo también he sucumbido a la tentación y me he leído el primer tocho, con el segundo no he podido me he quedado a la mitad, más que nada porque aburre. Si en el primero las tramas se entrecuzan y la novedad te resulta interesante en el segundo la forma de escribir, la repetición de tramas -que siguen siendo simples a más no poder- unos personajes planos con argumentos inexistentes y unas ganas por escribir páginas y páginas, pero que se podrían resumir si el autor hubiera querido nos lleva a una novela tostón.
Lo que más me ha sorprendido de todo esto no es que sea un bestseller más, sino que la crítica se haya rendido al autor sueco y lo comparen con los grandes del género como Raymond Chandler, Dashiell Hammet o James Elrroy. En fin puro sacrilegio cualquier libro de estos tres grandes vale más que toda la trilogía del autor sueco.
PD: para desintoxicarme estoy leyendo un ensayo sobre el golpe del 23-F de un autor que se está convirtiendo en uno de mis favoritos en español, Javier Cercas.
Actualización 29 junio de 2009: parece que no soy el único al que Millenium le parece mediocre
En un párrafo Marta Sánz hace el mejor análisis de tres tomos de setecientas páginas cada uno:
"En estas novelas se consiente la explicitud, el subrayado del discurso político y el maniqueísmo panfletario que no percibimos como ideológico porque se considera "lo normal". Se manejan los tópicos difundidos desde los medios y la triste utopía de que la pudrición de nuestro sistema cuenta con responsables individuales: es posible cambiar todo sin que nada cambie demasiado. El efecto es tranquilizador y el lector se siente satisfecho de leer una literatura entretenida y de calidad que ejerce la crítica respecto a los problemas de nuestras sociedades. Ni lo uno ni lo otro. En cualquier caso, el tipo de corsé en el que se encaja mi lectura es posible que determine mi aburrimiento"
2 comentarios:
Ése me lo ha regalado Sandiax Marx, aunque no lo podré leer hasta julio porque ahora estoy con Chesil Beach de Ian McEwan. Mi compañera ( y jefa) dice no le gusta la forma de escribir de Javier Cercas, yo no opino lo mismo.
Ya sabes que ese hombre no tiene ni idea y debería de asistir a un curso sobre cultura general.
El libro de Ian McEwan fue un de los diez mejores del año pasado según el Babelia o sea que tiene buena pinta.
Javier Cercas mola, Sandias Marx no mola. He aquí mi crítica analítica y profunda.
Hala un saludo a tus niños!!!!
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